jueves, 3 de julio de 2008

¿Qué tal sos como amante?

Así se llama uno de los artículos del nº 38 de Para tener una salud vital plus Como el título lo sugiere, es un test. Tras completarlo advertí los siguientes cuestionamientos (de mi parte):

1. “…no estamos hablando sólo de amor, un sentimiento tan complejo como para reflejarlo con pocas palabras. En este caso nos referimos sólo a lo sexual”.

¿Por qué hay que separar el amor del sexo? ¿Por qué no pueden ir juntos? Para eso hacemos un test para seres humanos y otro test para muñecas inflables. En fin, es contradictorio y ridículo que yo vea a mi mamá y hermanas como un tipo de mujer y al resto de las mujeres como sólo objetos sexuales.

2. Velada social en un salón, invitados, copas y buena música. Vos:

- charlás con tus amigos y de vez en cuando buscás al otro/a con la mirada
- no te separás ni un minuto y seguís a tu pareja a todos lados
- permanentemente estás susurrando cosas al oído del otro
- mientras tu pareja va de aquí para allá, vos te quedás en un rincón

Ok, muy buenas las opciones, pero ¿por qué tiene que ser así? Por ejemplo, en el primero dice “copas y buena música” y la verdad es que la buena música ya no existe en ningún escenario de la noche mendocina, salvo que sea el bar irlandés de la calle Colón o uno nuevo que pusieron en una ex playa de estacionamiento en la calle Arístides. Con un “¿cumbia nena?” lo primero que hacés es contar cuánto tiempo resta para volver a casa. La opción segunda (charlar con amigos y pispear un poco) en realidad lo que sucede es que con la misma pareja compartís la charla con amigos, por lo tanto no es necesario mirarla si la tenés a 20 centímetro de distancia. La última opción (quedarse en un rincón) no le pasa a uno, sino a los dos, ya que si ponen música kitch, automáticamente te marginás a la mesa de los morfis y ella te va a seguir siempre, y como mucho te dirá “saludo a las chicas y en 20 minutos nos vamos”. Vamos a otro punto del test.

3. Viajan largo tiempo en un auto en una ruta desierta:

- a veces buscás la mirada de tu acompañante
- buscás tocar temas que tengan que ver con el sexo
- aunque el momento pueda parecerte erótico, dejás que tu pareja haga o diga algo al respecto
- hacés continuas alusiones sensuales.

Con el mayor de los respetos, ¿cómo va a ser erótico andar en una ruta desierta mientras manejás un coche que sabés que es un arma letal, a la velocidad que vas?

Pongamos como escenario la Ruta 40, en La Tosca, a 60 kilómetros al norte de San Rafael. Si estoy manejando, mi mujer o estará leyendo una revista o estará apolillando (o como mucho preparando el mate). Y más que en huevadas eróticas, lo único que estás pensando es llegar rápido a San Rafael, pero sin exceder la velocidad máxima y además, rogar para que no se te aparezca un camión con damascos, que te obligue a reducir la velocidad a 40 kilómetros por hora. No podés manejar con el bocho en paños interiores. Eso es lo que sucede en realidad. No conozco a nadie que haya hecho los juegos eróticos de Alexandra, la sexóloga, en un Fiat Spacio, en el medio de la parte más desértica de la ruta 40, a 110 km por hora. Otro bochazo para el test.

4. Comenzás a desabotonarle la blusa, ella se resiste:

- vos no insistís
- le sujetás las manos y continuás
- fingís aceptar para volver a la carga
- aunque interiormente dolido, hacés como si nada hubiera pasado

La verdadera respuesta es que vos llegás fulminado a la cama (porque manejaste mucho y llevaste a todas las amigas de tu mujer a sus respectivas casas, porque los taxis estaban de paro y no había colectivos a esa hora), te ponés el pijama y prendés el televisor o agarrás la revista Selecciones (¡qué viejo!).

Y lo que hace ella es desvestirse sola, porque a vos ya te está agarrando el sueño. Ahí la mirás un poco y encendés una luz de alarma con el siguiente mensaje: si te sacás el maquillaje en menos de diez minutos, yo aguanto; si tardás diez años, me duermo. Y la verdad es que ellas siempre escogen la segunda opción. Así es que cuando ella sale del baño, ya lista para acostarse, si no pusiste el despertador del celular, habrá que esperar para otra ocasión.

En fin, este tipo de test suelen olvidar algunas respuestas que sólo te lo da la experiencia de la vida que no todos viven. Por ejemplo, no conozco algún test de pareja que incluya como opción “ella me transmite paz y confianza” a la hora de calificar por qué te enamoraste o por qué hay amor. Es que este tipo de respuesta la encontrás por sorpresa cuando te llega el momento y te da a entender que en el fondo (tanto de lo sexual como de lo amoroso), lo que vos querés es una solución y no un problema, y también alguien que esa transmita paz que silenciosamente te conquista para siempre y ayude a que los dos sean uno.

Las veces que he charlado de este tema con este tono pareciera que la gente se aburre (porque estos casos no hay razones para reírse de alguno de los dos).

No hay comentarios: